Escribir no sirve para nada.

Esto te dirá cualquier persona, en cualquier momento de tu vida, cuando te vea agarrar un boli.

0-10 AÑOS

Soy del 92. Desde mi infancia recuerdo haber aprendido a escribir, leer e imaginar, pero no tengo claro en qué orden. Pronto las redacciones de instituto se me quedaron cortas y los libros de mi edad no me transmitían nada. Devoraba libros recomendados para 12, 14, 16 años. Escribía constantemente y nunca estaba del todo satisfecha con mis textos.

10-16 AÑOS

En esta edad escribo para concursos de instituto (y gano varios), escribo historias en las que mis amigas son las protagonistas como regalo de cumpleaños, escribo imitando a mis autores favoritos, escribo sobre la realidad y las vidas de los que veo. Poco a poco, en mi cabeza se instala la idea de crear algo grande: lo intento con novela, ensayo, relato… pero nada está a la altura de mis ídolos literarios. Sueño con morir joven y dejar algo bueno escrito. A veces siento que escribo para no enloquecer. Intento asomarme a mi interior, pero me da mucho miedo.

16-18 AÑOS

Esta es mi mejor época como escritora. Entro en el mundo de los fanfics, historias alternativas basadas en betsellers y escritas por fans, como en el caso de Harry Potter. En los foros, la gente opina y comenta sobre lo que escribo. Recibo mucho feedback e ideas para aprender. Desarrollo relatos cortos y medianos con mis propias tramas, universos y personajes. Escribo TODOS los días varias horas. Experimento con estilos, periodos y figuras históricas: realismo mágico, romanticismo, generación del 98, etc. Vivo más en mis personajes que en mi vida.

18-22 AÑOS

No escribo apenas. Empieza mi época literaria más oscura. Me limito a desarrollar un pequeño diario de viajes de forma intermitente, pero jamás llego a enseñárselo a nadie. Escribo además artículos de opinión, entrevistas y pequeños reportajes durante mi carrera de Periodismo. Salvo excepciones, me parecen banales e insulsos. Las otras pocas ocasiones en las que recuerdo escribir es en un estilo o sobre temas con los que no me identifico, como si interpretara un papel. Nada de lo que hago lo siento real. Creo que escribir puede salvarme, pero me hunde más. El último año es especialmente duro. Mis antiguos personajes se convierten en mis demonios.

22-24 AÑOS

(Re)descubro la poesía con el Poetry Slam de Madrid.  Comienzo a escribir como divertimento. Pronto empiezo a conocerme mejor. Siento como si volviera a mi mejor época, cuando recibía feedback de los que me leían… solo que ahora me escuchan en vez de leerme. Es más vivo. Comprendo que puedo hacer reír, llorar y sentirlo yo misma al recitar. Veo emociones en las caras mientras hablo. Busco no aburrir jamás. Busco que nadie se sienta solo. Busco no sentirme yo sola de nuevo. Lo que escribo vuelve a tener valor. Tengo una función. Experimento con elementos muy visuales, extraídos de Periodismo y mis nuevos conocimientos sobre Diseño Gráfico.

24-26 AÑOS

Entre los 24 y los 25 desarrollo un blog en el que mezclo Literatura y Diseño: ilustro portadas de libros clásicos y escribo reseñas sobre ellos para fomentar su lectura entre adolescentes. Paralemente cada vez estoy más metida en el mundo Poetry Slam. Participo en Poetry Slam Móstoles y gano la temporada 2017-2018, representando a la ciudad en el Poetry Slam Nacional de Valencia (junio, 2018). Abandono mi blog temporalmente para autoeditar mi primer poemario, Poesía contra tu aburrimiento, un libro que mezcla juegos y poemas para luchar contra el aburrimiento en la poesía. Por último, me apunto a Poetry Slam Lavapiés y me convierto en la primera persona en ganar, al menos una vez, en todas las sedes slammers de la Comunidad de Madrid. Finalmente, me convierto en campeona de esta nueva sede durante la temporada 2018-2019.

¿Por qué he decidido…

ESCRIBIR| ILUSTRAR | MAQUETAR| CREAR| IMPRIMIR|  DISTRIBUIR

…este libro?